Cuando pienso en el mercado del lujo lo primero que me viene a la cabeza es sin duda París y sus Champs-Élysées. Epicentro de la moda, joyas con patrimonio, perfumes refinados, alta gastronomía, turismo de élite… Hoy en día la cultura del lujo es indispensable para Francia. Incluso cuando el país sufre recesión la industria del lujo eclipsa a las otras industrias. Los inicios del lujo francés se remontan al s.XVIII con Luis XIV «El Rey Sol» (el «Rey Derroche» debería haberse llamado). Durante aquella época nace el gusto por la elegancia, la sofisticación y el lujo. Francia se convierte en el país que dictamina las normas del buen gusto que traspasan fronteras y se transforma en embajador de la moda por excelencia.

Es curioso darse cuenta que mientras tanto, en la otra parte del mundo, esta época coincide con la prosperidad de los emperadores Kang y Qian. China era entonces el imperio más poderoso del mundo oriental y manufacturador de artículos de lujo como la cerámica, las sedas y el arte del bordado con dibujos elegantes. Incluso en tiempos romanos el César mostraba especial interés por estos productos orientales. Sin embargo, a pesar de este pasado glorioso el país de la Gran Muralla nunca ha sido reconocido internacionalmente como productor de esta industria.
La industria del lujo está íntimamente ligada con el fondo de la economía social y cultural. Actualmente los tres grandes núcleos productores del mercado del lujo son Europa, Estados Unidos y Japón. El primero cuenta con un patrimonio, una marca y una tradición artesanal familiar heredada de generación en generación: Cartier, Mont Blanc, Louis Vuitton… Después de la II Guerra Mundial, con la prosperidad y el crecimiento de Occidente surge la situación idónea para el desarrollo de este mercado a gran escala. La trayectoria de Japón como representante del nuevo poder económico es obviamente más corta. Las marcas de lujo en Asia principalmente han nacido después de la década de los 90.

Louis Vuitton (Hong Kong, China). Fotógrafo: Jerome Favre/Bloomberg.
Después de un crecimiento muy rápido de la economía China, durante más de 20 años, ha emergido una nueva clase rica que debido a la alta población del país en términos absolutos es muy numerosa. Con más de 20 millones de millonarios, se ha convertido en el tercer país consumidor de bienes de lujo. Negocios de todo el mundo extienden la alfombra roja a sus clientes chinos proporcionándoles privilegios y derrochando atenciones y respeto. El peso de Japón, está decreciendo pero aun así representa el 41% de las compras de moda de lujo en todo el mundo. Es de esperar que con el crecimiento veloz, China pueda convertirse en un consumidor tan importante como Japón.

«El Este es el nuevo Oeste», la misión actual de China es rehabilitar la industria del lujo, industria creciente en Asia. Todos somos conocedores hoy en día de que con el fín de aumentar su rentabilidad, muchas marcas han trasladado gradualmente su lugar de producción a los países asiáticos. Esto proporciona a China grandes oportunidades para aprender como un gran país de exportación de materias primas y acabados para la industria del lujo que es. China sabe que es un largo camino pero tienen el referente del país vecino Japón, que ha generado varias marcas de alta costura en apenas quince años y triunfan en las pasarelas de Occidente.

Issey Miyake, Akira Onozuka, Yohji Yamamoto y Kenzo. Grandes diseñadores que han revolucionado las pasarelas Europeas.

De momento en 2012 hemos leído noticias como la de que Causeway Bay en Hong Kong adelanta a la 5th Avenue de Nueva York como calle comercial con la renta más alta del mundo por primera vez en 11 años. O también que el gigante de lujo francés LVMH ha comprado el 10% del grupo de moda chino Trendy International como inversión de futuro. Con este impulso de renombre ya nos da una pista de como se están preparando estas potentes marcas para el desembarco en la vieja Europa y Estados Unidos. La empresa es propietaria de aproximadamente 300 tiendas y cuenta con centenares de franquicias en el continente asiático de sus cuatro marcas: Ochirly, Five Plus, Love Ysabel y Trendiano. Las marcas de lujo tradicionales demuestran de esta manera el gran interés por introducirse en el mercado chino y qué mejor forma que comprando directamente sus marcas y su fondo de comercio.

Ochirly es la marca líder del grupo con 200 tiendas en Asia y está enfocada a una consumidora de clase media.


Imagen de lujo en el interior de las tiendas.

El grupo de Ochirly es el equivalente al grupo Inditex en España.

Ochirly en Asia es el equivalente a Zara.
Desde hace mucho tiempo China sueña con lanzar al mundo su propia moda nacional. Desean mostrar su alto estatus social al mundo pero ya no vistiendo los prestigiosos diseños de alta costura italianos o franceses sino los suyos propios. Fundada en 1997 por Zhang Zhi Feng, NE-TIGER es la primera marca de lujo de moda en China que presume de integrar en sus diseños el aroma de la cultura china tradicional, antiguos métodos de costura y los factores de la moda de lujo internacional. Sus diseños reflejan la tradición, la cortesía, el patrimonio y el orgullo de sus 5000 años de historia.

China Fashion Week

Como marca de lujo NE-TIGER se enfrenta a los prejuicios que este mercado tiene en la cultura china. Por un lado el deseo de gastar fortunas en un país tremendamente capitalista, de demostrar el estatus de «nuevo rico» y disfrutar del placer que proporcionan estos artículos. Pero por otro lado quedan reminiscencias tradicionales que huyen del concepto del lujo entendido como derroche y posesión de más de lo que uno necesita. La marca busca y encuentra soluciones para inspirar la compra asociando el lujo a los sueños, a la calidad, a la exclusividad y al liderazgo global de la moda.



El gigante asiático ambiciona una sociedad avanzada y tiene claro que el lujo crea ese estado de bienestar, una estética más armoniosa y de calidad. Sabe que el camino no es fácil pero abre con ilusión sus ojos rasgados a esta industria y ambiciona su futura presencia en los Campos Elíseos de París, la mejor imagen de marca del mundo.
Crees que China reconoce el concepto del lujo y puede seguir los pasos de Japón?… Crees que puede llegar a crear marcas de alta costura de éxito internacional como Louis Vuitton, Gucci o Dior?…
Me gusta esto:
Me gusta Cargando...